Somos seres que vagamos por la tierra deseosos de alcanzar la felicidad...¿qué pasa cuando no conseguimos llegar a ella?
La muerte en vida sin más deseo que el de agonizar eternamente...
5
comentarios:
Anónimo
dijo...
Siempre tiene ke haber esperanza... Si se nos priba de eso nos kitan todo lo que nos hace ser humanos y nos deja en el umbral de la derrota. Prefiero morir intentando conseguir mis sueños ke alcanzarlos y dejarlos escapar muriendo sin nada
ahí le has dado en el clavo darko :) Me gusta tu postura, es cierto, no perdamos nunca la esperanza, kien sabe, el día menos pensado la tristeza termina y da paso a la infinita felicidad...
TRISTEZA, escarabajo de siete patas rotas, huevo de telaraña, rata descalabrada, esqueleto de perra: Aquí no entras. No pasas. Ándate. Vuelve al Sur con tu paraguas, vuelve al Norte con tus dientes de culebra. Aquí vive un poeta. La tristeza no puede entrar por estas puertas. Por las ventanas entra el aire del mundo, las rojas rosas nuevas, las banderas bordadas del pueblo y sus victorias. No puedes. Aquí no entras. Sacude tus alas de murciélago, yo pisaré las plumas que caen de tu manto, yo barreré los trozos de tu cadáver hacia las cuatro puntas del viento, yo te torceré el cuello, te coseré los ojos, cortaré tu mortaja y enterraré tus huesos roedores bajo la primavera de un manzano
5 comentarios:
Siempre tiene ke haber esperanza... Si se nos priba de eso nos kitan todo lo que nos hace ser humanos y nos deja en el umbral de la derrota.
Prefiero morir intentando conseguir mis sueños ke alcanzarlos y dejarlos escapar muriendo sin nada
ahí le has dado en el clavo darko :) Me gusta tu postura, es cierto, no perdamos nunca la esperanza, kien sabe, el día menos pensado la tristeza termina y da paso a la infinita felicidad...
leyendo esto he recordado a Neruda:
ODA A LA TRISTEZA
TRISTEZA, escarabajo
de siete patas rotas,
huevo de telaraña,
rata descalabrada,
esqueleto de perra:
Aquí no entras.
No pasas.
Ándate.
Vuelve
al Sur con tu paraguas,
vuelve
al Norte con tus dientes de culebra.
Aquí vive un poeta.
La tristeza no puede
entrar por estas puertas.
Por las ventanas
entra el aire del mundo,
las rojas rosas nuevas,
las banderas bordadas
del pueblo y sus victorias.
No puedes.
Aquí no entras.
Sacude
tus alas de murciélago,
yo pisaré las plumas
que caen de tu manto,
yo barreré los trozos
de tu cadáver hacia
las cuatro puntas del viento,
yo te torceré el cuello,
te coseré los ojos,
cortaré tu mortaja
y enterraré tus huesos roedores
bajo la primavera de un manzano
no hay mayor causa de llanto que la de no poder llorar...
Hay que abrir los ojos para darse cuenta que no por mucho desear ser infeliz se consigue...
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